Aunque su llegada estaba prevista a las 12 del mediodía, se han adelantado y las 11:00 horas de esta mañana ha atracado en Puerto Siles, el velero RI-ROS, de la familia Ribes-Rosner, procedente de Zakynthos, localidad Griega que probablemente diera su nombre a Sagunto. Han querido que coincidiera la vuelta del velero con el día en que se celebra la fiesta local de los Patrones Abdón y Senen de Sagunto.

El capitán de la embarcación, Vicente Ribes, de 73 años de edad, ha ido asistido durante el viaje de ida y vuelta por una tripulación de jubilados: Manolo García Hendrix de 61 años, Vicente Sureda de 65 y el socorrista profesional Gonzalo Mora. El velero partió el 7 de julio hacia la isla de Zakynthos. A lo largo de la travesía han recorrido más de 2.600 millas náuticas y han visitado 12 islas, «a cual de ellas más bonita» afirma Ribes.

A su regreso Vicente Ribes se mostraba muy satisfecho por estar de vuelta: «Hemos llegado sanos y salvos y con un regalo para nuestro Ayuntamiento como símbolo de Hermandad entre Sagunto y Zakynthos» El Capitán Ribes hará entrega del Olivo donado por el Alcalde griego, este viernes a las 12 en el Ayuntamiento de Sagunto a la concejala de Hermanamiento, Davinia Bono. «Pienso que la nueva Glorieta es el sitio idóneo para plantar este olivo, presente de las autoridades de la isla griega, que traemos con todo el cariño durante la travesía de vuelta», remarcó Vicente Ribes.

A su llegada el capitán del velero RI-ROS narró a los medios de comunicación unas breves notas del viaje. La ida fue más o menos así de Puerto Siles a Mallorca, islas Eoleas, Sta Mª de Salinas, Sicilia y de allí rumbo directo a Zakynthos pero lo que verdaderamente les emocionó es que cuando llegaron les estaban esperando muchas personas, «que nos agasajaron, nos enseñaron la isla... Fue increible se portaron como si fueran hermanos», afirma Ribes.

Posteriormente fueron a Itaca, «fue un privilegio estar allí y el puertode Itaca, ¡Madre de dios hay que verlo! De allí pusimos rumbo a Patrás en el golfo de Corinto y experimentamos una sensación especial al atravesar el canal de Corinto que cruza la península del Peloponeso y salimos al mar Egeo y de allí a Quicera, pero tuvimos que regresar a puerto cuando habíamos andado cinco horas de navegación porque nos encontramos con la tormenta perfecta» narra el capitán del crucero.

Tras navegar y atracar en varios puertos más. Desde el Suroeste de Cerdeña ya pusieron rumbo directo a Puerto Siles, un trayecto de 400 millas que recorrieron en tres noches y cuatro días.

Otras de las anécdotas que ha contado Ribes a su llegada es que han encontrado muchos marineros de varios países de la UE que como ellos iban haciendo viajes de placer. «Nos hemos encontrado con marineros, gente mayor que pilotaban barcos de todas clases, personas abiertas al diálogo y a la ayuda, a la solidaridad. Ha sido estupendo».

En Zakynthos conocieron a un joven que había cruzado la isla para ir a saludarlos y les comentó que su madre era madrileña. En Carloforte isla de San Pietro (Cerdeña) también un muchacho subió al barco a saludarlos y les comentó que su suegra era de Mojácar y su padre de Cartagena.

Manolo García Hendrix una de los tripulantes del velero RI-ROS,cuando tocaba la guitarra y el barco se llenaba de gente. «En esas tertulias un señor de los que frecuentaba el barco dijo una frase que sintetiza un poco la filosofía del Mediterráneo y es: La vida es demasiado corta como para beber vino malo».

Destaca Ribes que en Zakynthos se quiere hermanar con Sagunto. «Pero tienen unos deseos increíbles, tienen obsesión con esa idea, lo llevan mamando de pequeños, les pasa un poco como a mí que desde que leí en el salón de plenos que una colonia griega de Zakynthos fundara Sagunto».

Fuente: eleconomico.es